Ginebra, 8 ene (Prensa Latina) Los hospitales de Gaza y Cisjordania y otras infraestructuras médicas vitales fueron atacados casi 600 veces desde que estalló la guerra en la franja palestina, informó la OMS.
Durante esas 600 agresiones murieron en las instalaciones sanitarias 613 personas y más de 770 resultaron heridas, precisó la Organización Mundial de la Salud (OMS)
El portavoz de esa agencia, Christian Lindmeier condenó la continuación de los combates y los bombardeos y afirmó que «la reducción del espacio humanitario y los ataques contra la asistencia sanitaria están llevando a la población de Gaza a una situación límite».
Los ataques han afectado a 94 centros sanitarios, entre los que se encuentran 26 hospitales dañados del total de 36 que hay en la Franja de Gaza.
Por su parte, la directora del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), Catherine Russell afirmó en un comunicado que los niños de Gaza «están atrapados en una pesadilla que empeora cada día que pasa».
Señaló que las vidas de los más pequeños corren cada vez más peligro debido a enfermedades prevenibles y a la falta de alimentos y agua, al tiempo que llamó a protegerlos de la violencia y brindarle acceso a servicios y suministros básicos.
Los casos de diarrea en niños menores de cinco años aumentaron de 48 mil a 71 mil en sólo una semana a partir del 17 de diciembre, lo que equivale a tres mil 200 nuevos casos al día.
Russell subrayó que este aumento significativo indica que la salud infantil en Gaza se está «deteriorando rápidamente». Antes de la escalada de las hostilidades, se registraba una media de dos mil casos al mes de diarrea en menores de cinco años.
En un comunicado emitido por la Oficina de Coordinación para los Asuntos Humanitarios (OCHA), los trabajadores humanitarios dejaron claro el jueves último que la velocidad y el volumen de la ayuda se ven continuamente obstaculizados por las condiciones sobre el terreno.
«La ONU y nuestros socios humanitarios están comprometidos y siguen haciendo todo lo que pueden para satisfacer las crecientes necesidades en Gaza. Sin embargo, el entorno operativo y la capacidad de respuesta siguen viéndose obstaculizados por los riesgos de seguridad, las limitaciones de movilidad, los retrasos y las denegaciones», indicó el texto.